05/06/2020 10:40 h.

Encuentro de intercambio entre regidores y regidoras de Servicios Sociales Básicos para trazar líneas de futuro

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El refuerzo de los equipos profesionales, la atención a las personas mayores, a la infancia y la adolescencia y a las mujeres víctimas de violencias machistas, como tambien la respuesta a las emergencias sociales y a la salud mental son los principales retos señalados durante el encuentro.

El viernes 29 de mayo tuvo lugar el primer espacio de encuentro y de intercambio con regidores y regidoras de servicios sociales de la provincia de Barcelona después del inicio de COVID-19, convocada por el Área de Cohesión Social, Ciudadanía y Bienestar de la Diputación de Barcelona.

Lluïsa Moret, presidenta delegada del área, presidió la sesión y explicó que este es un “espacio estable de interrelación, de diálogo y de intercambio – pensado ya antes de la COVID-19- en el proceso de construcción de las líneas que tienen que definir las políticas sociales, y en este caso de los servicios sociales, conjuntamente entre la Diputación de Barcelona y los ayuntamientos de la demarcación”. Este proceso se sitúa en el marco conceptual que se está trabajando desde el área por reconceptualitzar las políticas sociales y dotarlas de una visión estratégica e innovadora, en base a un enfoque multidimensional, así como en el nuevo contexto de la pandemia que incorpora nuevas necesidades, demandas y realidades a abordar.

Durante la sesión los regidores y regidoras valoraron positivamente contar con este espacio de intercambio y posaron de manifiesto las necesidades que afrontan los servicios sociales básicos derivadas de la emergencia alimentaria y habitacional, con una importante carencia de recursos de los municipios, tanto en cuanto al alojamiento y acompañamiento social a personas sin techo, como ante el riesgo de pérdida de la vivienda de familias vulnerables.

También se hizo referencia al crecimiento de las problemáticas de salud mental y a la necesidad de reforzar los programas de apoyo psicológico a la ciudadanía, así como los programas de atención a las personas mayores (especialmente el SAD), a la infancia y en la adolescencia y a las mujeres en situación de violencias machistas.

Coincidieron en que los equipos de servicios sociales básicos se encuentran saturados, con una sobrecarga importante de trabajo tanto a causa del crecimiento de las necesidades sociales, como de la gestión administrativa. Se pidió especialmente un refuerzo de los equipos y la incorporación de nuevos perfiles como la figura del psicólogo para ofrecer una atención más integral.

Lluïsa Moret explicó algunos de los programas impulsados por la Diputación de Barcelona para dar respuesta a estos retos, como el refuerzo del Servicio Local de Teleasistencia, de las tarjetas monedero destinadas a la alimentación y bienes básicos y del programa de arreglo de viviendas, entre otros. También anunció que se pondrán en marcha actuaciones para el refuerzo de los profesionales de los servicios sociales básicos, el apoyo psicológico a la ciudadanía o el impulso de programas comunitarios.

Finalmente, se presentaron las líneas de financiación de la Diputación de Barcelona a los servicios sociales básicos que van desde el fondo de prestación anual para la cobertura de gastos estructurales hasta los nuevos programas extraordinarios para hacer frente a los gastos sociales generados por la Covid-19, como la línea 7 del programa de emergencias municipales, dotado con 15 millones de euros, o el programa “Ningún municipio atrás”, en el marco del Plan de choque para apoyar a los gobiernos locales en las actuaciones contra la COVID-19, dotado con otros 15 millones de euros.